Este trabajo es una importante pieza de la terapia de CEASE y está dirigido a los homeópatas. En el mismo, el Dr. Tinus Smits comparte su visión de que la homeopatía puede dirigir las experiencias humanas universales de llegar a la encarnación a partir del mundo espiritual.
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3 semanas antes de su muerte física, el Dr. Tinus Smits publicó su sorprendente trabajo sobre el método CEASE para el autismo. Ordene el libro en Amazon.
¡Sí, es una forma muy efectiva para tratar el autismo con resultados sorprendentes!
Esa es la conclusión a la que arribó el Dr. Smits después de haber visto más de 300 casos con todos los niveles de gravedad. Basado en su experiencia, el autismo es una acumulación de diferentes causas, aproximadamente el 70% es debido a las vacunas, 25% a los medicamentos tóxicos y otras sustancias tóxicas, el 5% a algunas enfermedades. Con la isoterapia (ver más abajo), una forma de la homeopatía que emplea preparaciones homeopáticas realizadas a partir de las mismas sustancias causales, las improntas tóxicas se pueden borrar.
El tratamiento de niños e incluso adultos autistas ha madurado a través de 300 casos en los últimos tres años, y se denomina Terapia CEASE, siglas que refieren al acrónimo de Eliminación Completa de las Expresiones del Espectro Autista. Paso a paso, todos los factores causales (vacunas, medicación de rutina, exposiciones a tóxicos, etc.) son detoxificados con medicamentos homeopáticos diluidos y potenciados preparados a partir de las sustancias que ocasionaron el autismo. Actualmente se emplean las potencias 30C, 200C, 1M y 10M para limpiar el campo energético del paciente de la impronta dejada por sustancias tóxicas o enfermedades.
Los terapeutas CEASE se entrenan en un curso durante 5 días, impartido por instructores de terapia CEASE, para garantizar alta calidad en los tratamientos y garantizar la correcta aplicación de este método. Solo son certificados como terapeutas CEASE los médicos homeópatas que superaron con éxito el examen final. Ellos se mantienen en contacto con el resto de los terapeutas CEASE alrededor del mundo a través de un foro interactivo y recibirán supervisión.
Hasta ahora, el principal obstáculo para la curación parecería ser la falta de información sobre las causas de esta enfermedad. Cuando se pasan por alto o se desconocen acontecimientos importantes de las historias de vida de estos niños y de sus padres, podría faltar una clave esencial para la curación.
Con el uso de las sustancias causantes bajo la forma de remedios homeopáticos se pueden observar sus profundos efectos tóxicos a medida que los niños comienzan a reaccionar a los remedios. Las reacciones hacia los remedios isopáticos son muy características, de modo que no cabe duda alguna sobre el vínculo que existe entre las toxinas como causales y el desarrollo de autismo como efecto. De este modo el Dr. Smits descubrió, paso a paso, por que el autismo y otros problemas de comportamiento, junto a sus problemas específicos de desarrollo, se han visto dramáticamente incrementados en los últimos diez a veinte años. Es también evidente que los niños autistas no sufren por una sola causa, sino por la acumulación de diferentes causas.
Durante el embarazo y los dos primeros años de vida el cerebro es extremadamente vulnerable y debe protegerse tanto como sea posible. La medicación administrada durante y después del embarazo, en especial las vacunas, son muy tóxicas para los cerebros de los niños pequeños. Incluso las enfermedades, la medicación y vacunación en el campo energético del padre y de la madre previas al embarazo pueden transmitirse al niño por la transferencia de energía. En el libro "Autismo: más allá de la desesperanza" se presentan varios ejemplos de esto.
Durante sus investigaciones para lograr la curación completa, el Dr. Smits se vio cada vez más asombrado acerca de como algunas sustancias, incluso aquellas no calificadas como tóxicas, podían ser un factor causante de autismo u otros trastornos del desarrollo. Por ejemplo, vio una mejora dramática en una niña autista mediante la desintoxicación de un aerosol nasal (que contenía xilometazolina), que la madre había usado regularmente durante su embarazo. Los medicamentos prescriptos y los de venta libre, la exposición a sustancias químicas, que son ajenas al cuerpo humano y fundamentalmente tóxicas, tienen cada vez más incidencia como causales de la enfermedad. Esto no sólo es aplicable para las vacunas, sino también para muchos de los tratamientos prescriptos por los médicos modernos.
Junto con el tratamiento isopático añadimos también la medicina ortomolecular para nutrir adecuadamente el cerebro de estos niños y para restablecer apropiadamente la función intestinal. Muchos suplementos se emplean para el tratamiento del autismo y son valiosos, sin embargo sólo empleamos algunos de ellos: la vitamina C, magnesio, zinc y aceite de pescado. Estos suplementos sirven como un soporte para el proceso de curación a lo largo del tratamiento, mientras que el proceso de curación en sí mismo proviene del tratamiento isopático. Estos suplementos suavizan el proceso completo de curación y contribuyen a evitar las severas reacciones que tienen lugar durante la desintoxicación.
Como tercera herramienta también utilizamos la homeopatía clásica y la homeopatía inspirativa, que se discuten ampliamente en el libro Autismo: más allá de la desesperanza. Ambas juegan un importante rol en la completa curación de los niños autistas. Sin embargo, si no se resuelven las causas específicas responsables del el desarrollo del autismo, la homeopatía clásica por sí sola no puede traer la curación completa en la mayoría de los casos. Sin embargo, esta forma de curación puede dar resultados muy alentadores, pudiendo aportar el toque final para completar la curación.
